★Eℓ вℓσg ∂є Áℓναrσ★

domingo, 27 de enero de 2008

*___Pero Marta Ya No Dice Nada___*


Y entonces la policía entró en la habitación y vio a Marta tendida en el suelo, inmóvil, rodeada de sangre. El policía Michel investigaba el caso y recogió todas las pruebas que consideraba necesarias para realizar su trabajo. Que le llevaría un gran período de tiempo hasta encontrar la causa de la muerte de esa joven, Marta.

Era un viernes por la noche y Marta salía de su casa para estar con sus amigos. Después de cenar se despedía de sus padres en la puerta de su casa, como hacía todos los fines de semana, y siempre emprendían la misma conversación, o muy parecida:

-No vuelvas muy tarde hija, y ten cuidado.
-Lo sé mama, que ya soy mayorcita, ya no soy una niña, tengo veinte años.

Nada más bajar de su casa se encontró a su mejor amiga, María y a su novio Lucas, que la esperaban en el coche de este último. Se saludaron y desaparecieron a toda velocidad entre la oscuridad de la noche.

Llegaron a la fiesta, era el cumpleaños de un amigo y había preparado una fiesta en su casa llena de invitados, entre ellos estaban los tres amigos, Marta, María y Lucas .

Empezó la diversión; música, bebidas y drogas ambientaban la casa del cumpleañero.
Marta al ver la situación en la que se encontraba, decidió abandonar la casa, pero su novio se lo impidió y le dijo que no le pasaría nada, que si no quería consumir bebidas alcohólicas o drogas, que no lo hiciera, pero que no le “cortase” el rollo.
Era el cumpleaños de su amigo y no le iba a hacer el feo de irse en un día tan especial para él.

Marta no dejó la casa por el momento, pero no tardaría demasiado en hacerlo. Se fueron las dos amigas hacia la cocina para coger algo de beber y después al salón para moverse al ritmo de la música.

A las tres horas había menos gente que al principio, y la poca gente que había se encontraba tumbada por los suelos y sin fuerzas para hacer nada. El efecto del alcohol y junto con las drogas, al principio les daba energía y fuerza para llegar a lo más alto, se sentían libres y muy ágiles física y mentalmente. Pero con el paso del tiempo cada vez estaban más agotados y sin ganas de nada.

Marta y su amiga María eran las únicas que no percibían esos efectos ya que no habían consumido ambas sustancias. En cambio Lucas era uno de los que se encontraba tendido en el suelo, a pesar de que Marta le había prohibido hacer lo que los demás e incluso en un momento de enfado abandonó la casa. Él no la hizo el más mínimo caso y siguió haciendo lo que le parecía adecuado.

Llegó la hora de irse a casa y Marta llamó a sus padres para avisarles de que no iría a dormir, mintiéndoles al decirles que dormiría en casa de su mejor amiga, María.

Entre las dos amigas levantaron a Lucas del suelo y medio arrastrado le llevaron al hotel más cercano para pasar la noche. Y digo medio arrastrado porque fue obligado, ya que quería continuar con la fiesta y porque las drogas le habían dejado sin fuerzas.

María se dirigió a su casa dejando a la pareja en el hotel.
Marta nada más llegar, empezó a discutir con su novio echándole en cara todo lo que había hecho ella por él. Y sin embargo él sólo le demostraba cosas malas, y no la hacía el menor caso.

Lucas permaneció callado durante toda la conversación mirándola de manera desafiante y con los ojos que penetraban en los de ella.
Hasta que en un momento de ira se levantó de la cama en la que estaba sentado y la dijo que ya no aguantaba más.

La empujó contra la cama y la golpeó seguidas veces con una silla de escritorio. Con sus grandes manos de asesino, la agarró de su fino cuello, apretándola más y más impidiendo que el oxígeno llegara a sus pulmones.

El silencio ancestral de la noche lo dijo todo, Marta y su historia había terminado.

viernes, 18 de enero de 2008

[★] El €uro En Nuestras Vidas [★] *...Monólogos Desde El Pupitre...*


Estos europeos nos han engañado introduciendo el Euro en España. Antes un chicle costaba 5 pesetas, y ahora cuesta 5 céntimos que no es lo mismo; una barra de pan cuesta 60 céntimos y antes costaba 60 pesetas… y hasta en la tienda de los chinos ya no hay nada a 60 céntimos, lo más barato cuesta 75 céntimos.

E otro día voy a un bar y pido un café, el camarero me dice que es 1.20€...¡por ese precio me tenía que haber puesto por lo menos una tostada!, digo yo vamos. Termino el café y voy al Carrefour.

¡Menos mal que han puesto el 3x2!, pago dos y me llevo tres, y la tercera parece que te la regalan y todo : ¡Menudo chollo!
Eso era peor que en las “Rebajas”, allí se oía de todo…¡Que lo he cogido yo primero! , ¡Suéltame los pelos!, ¡Oiga que ese es mi carro!... En fin todo un caos.

Ayer iba en un taxi y el taxista puso la radio ( muy antipático el hombre, todo hay que decirlo ), entonces escuché a un señor que decía que no pasa nada, que la economía está bien y en general España va bien. Pero…¿Como va a ir bien si no tenemos ni un duro?, si con el cambio de año ha subido todo y los sueldos siguen igual de pésimos que el pasado. Incluso se han inventado un impuesto para que los CDs y los mp4 cuesten más caros.

¡Que manera de fomentar la cultura! Si quieres ver una película de estreno, pues te la descargas de Internet o mejor coges un autobús y te vas al cine de Xanadú ( o de cualquier otro centro comercial ) para ver la película, y si además te compras las palomitas y el refresco ¡te sale por un ojo de la cara! ¿Y cómo vas a dejar de ir a jugar a los billares del Tazz, que está justamente al lado? Pues…¡la ruina total! Así que te sale más rentable bajártela y verla en tu casita que no te gastas ni un duro y encima estás más cómodo tumbado en tu sofá. ¡Ah! y ya si quieres palomitas, pues te las compras en los frutos secos de debajo de tu casa, que son más baratas y están más “buenas”, a no ser que se te quemen como me pasa a mi la mayoría de las veces. Todavía no le he cogido el truquillo a eso del microondas.

Ayer por ejemplo me apeteció ir a ver un musical de un teatro de Madrid, pero como somos cuatro en mi familia, pues claro la broma nos sale por un pastón, así que… que remedio me tendré que quedar con las ganas de ir.
Esperaré por lo menos a que me toque la primitiva.

Claro es que es lo importante, yo me he dado cuenta que al final lo que importa, lo que importa de verdad es el dinero, y vacilar del dinero que tú tienes. Porque tú te acabas de comprar una moto y qué haces, entras a cualquier sitio y con las llaves así como si fueses un helicóptero. Tú te compras un móvil nuevo y lo primero que haces es poner la canción mas chula y moderna que tengas y fingir que te llaman…¿Sí dígame?.Y el que esté a tu lado te pregunta:¿Quién era? . ¡Ah! Nadie, ¡se han confundido! Y solo para enseñar tu súper-mega-ultra-móvil de última generación.

Bueno pues haber si empiezo pronto a trabajar, pero no porque me guste porque esa gente que dice que le gusta trabajar me hace gracia, nada más dicen mentiras. ¡Por dios a nadie le gusta trabajar! Bueno hay gente que trabaja pero es por dinero. O mejor dicho haber si un día de estos me toca algo, porque sin dinero no se va absolutamente a ningún sitio.

martes, 18 de diciembre de 2007

_★_ NocheBuena _★_


Era Nochebuena y el cielo se encontraba repleto de estrellas que relucían y junto a la luna alumbraban las calles de Madrid. Según me había contado mi abuelo, las estrellas de aquella noche eran las ilusiones de todos los niños, que esperaban recibir los mejores regalos, ya que su comportamiento había sido “bueno” durante ese año, que pronto iba a finalizar.

Ese cielo tan brillante era precisamente para anunciar a los habitantes de la Tierra que se encontraban en la víspera de la Navidad, por lo que nadie podía tener enfados, ni peleas, ni guerras…Sino que era momento de que la familia estuviese reunida disfrutando de aquella noche tan bonita y especial.

Pronto empecé a despedirme de mi familia para irme a la cama, ya que sino Papa Noel al verme aún despierto, se iría a repartir los juguetes a otros niños dejándome a mí para el final.

Una vez que me encontraba arropado hasta la cabeza con el edredón de mi cama, se me venían a la cabeza las preguntas de todos los años en Nochebuena, esas que no me permitían dormir y me dejaban toda la noche en vela. ¿Existe en realidad Papa Noel? ¿Y los Reyes Magos? ¿Y si se le olvida mi regalo? ¿Le dará tiempo dejar mi regalo debajo del árbol de Navidad con todos los niños que hay en el mundo? …

Mis amigos me habían estado diciendo que ni Papa Noel ni los Reyes Magos existían. Y yo siempre les respondía de la misma manera - ¿y entonces los regalos qué, eh listos? – pues no lo sabemos, pero lo que si sabemos es que no existen porque…¿Los has visto alguna vez?- contestaban ellos.
¡No! ,pero que no los hayamos visto nunca, no quiere decir que no existan, porque el aire nunca lo hemos visto y existe. Ni las hadas, ni los duendes, ni los gnomos, ni el Ratoncito Pérez… - les decía yo-.

Estaba soñando con los regalos que me iba a encontrar al día siguiente y con la conversación que tuve con mis amigos, cuando de repente me desperté. Bajé por las escaleras para ir hacia la cocina y coger un vaso de leche, cuando a mi oído llegaron unos ruidos extraños que procedían del salón. Yo no le di la mayor importancia porque pensé que provenían de la calle. Entonces continué mi paso lento, con los ojos casi cerrados por el sueño que les podía y cogí mi vaso de leche para bebérmelo.

Dejaba el vaso sobre la encimera cuando de nuevo sonó un ruido, pero éste más grande. No tuve más remedio que ir al salón, ya que la curiosidad de porqué se producían esos ruidos recorría todo mi cuerpo.


Abrí la puerta sigilosamente encontrándome después con dos piernas bastante gruesas que colgaban de la chimenea, intentando escapar de esa presión que las paredes de ésta hacían sobre ellas.

Lo primero que hice es preguntarle que si necesitaba ayuda y esta persona tan especial me dijo que sí, con una voz muy grave. Lo único que hice fue tirar de sus piernas con mi mayor fuerza y como me di cuenta de que era imposible decidí pedir ayuda a mis padres.
Mis padres se despertaron sobresaltados al oírme que les llamaba, les expliqué lo sucedido y pronto conseguimos sacar entre todos a ese pobre hombre que se encontraba atascado en nuestra chimenea.

Al bajarle me di cuenta que ese hombre tan especial era

Papa Noel . ¡Cómo no me había dado cuenta antes!; era alto, muy alto y con una gran barriga. Vestía un gorro y un traje rojos, y tenía una gran barba blanca que hacía juego con su pelo canoso.

Aquella fue una de las mejores noches de mi vida, Papa Noel me dio los regalos que yo quería y lo mejor de todo es que le había visto a él, a Papa Noel. Pronto se lo conté a mis amigos y desde ese día nunca he dejado de creer en Papa Noel, ni en los Reyes Magos, ni en el Ratoncito Pérez, ni en las hadas, ni en los duendes, ni en los gnomos…











¡Feliz Navidad a Todos!

lunes, 12 de noviembre de 2007

Amor A Primera Vista ... ♥


De pequeño, siempre le contaba Lourdes a su hijo la misma historia, la de Romeo y Julieta. Aquella historia que habla de ese amor tan apasionado donde dos jóvenes se enamoran uno del otro, pero ese amor no es aceptado por la gente de su alrededor ni mucho menos, por sus familiares respectivos, ya que estas dos familias se encuentran con diversos enfrentamientos y conflictos. Pero todo lo que puedan hacer estas dos familias para deshacer ese sentimiento tan especial que les une a Romeo y Julieta no será suficiente, ya que ellos harán todo lo posible por seguir juntos. Juran amarse y llevan su juramento hasta la muerte.


Esta historia muestra que el amor es una necesidad de la persona que no se puede evitar, llevada a la grandilocuencia.



Y a Santiago (el hijo de Lourdes) la parte que más le gustaba era ésta:


Romeo: Julieta...¿estás allí?


Julieta: ¿Romeo, eres tú mi querido Romeo?


Romeo: Si Julieta, estoy aquí afuera.


Julieta: ¡Oh Romeo! si supieras cuanto te amo mi querido Romeo.


Romeo: y yo a ti mi querida Julieta.


Julieta: entonces renuncia a tu apellido y yo...dejare de ser una Capuleto.


Romeo: ¿Lo dices en serio?


Julieta: Así es, te amo demasiado.


Romeo y Julieta: Juntos por siempre--y se besan apasionadamente--.


(……………………………….)


Romeo: Julieta…¿estás allí Julieta?


Julieta: Huye mi fiel Romeo y recuérdame siempre.



Era un Sábado y hacía muy mal tiempo, se pasó todo el día lloviendo de manera que parecía no terminar nunca y que todos saldrían nadando de sus casas en la pequeña ciudad donde vivía Santiago. Parecía que ese día no iba a favor de nuestro protagonista de la historia (Santiago Salego) ya que éste se despertó como un día cualquiera, es decir, yendo al baño primero para lavarse y vestirse, y después bajando por las escaleras… pero ese día se encontró en la puerta principal, que estaba nada más bajar las escaleras, a Dolores, la criada, con una maleta muy grande, y esto no era algo que ocurría todos los días. Santiago le preguntó con los ojos entre abiertos, por lo poco que había dormido esa misma noche, que porqué estaba a esas horas sin el uniforme y sujetando una maleta frente a la puerta de su casa. Dolores le dijo que tenía algo muy importante que contarle y que éste era precisamente el momento que había elegido para decírselo. Empezó así :


Dolores – Santiago cariño, debes saber que a veces pasan cosas buenas pero otras veces también pasan cosas malas en la vida, y que no por eso vas a dejar de ser tú, siempre serás la misma persona. (Santiago al oír estas palabras abrió todo lo que pudo los ojos, ya que le interesaba lo que le estaba diciendo la criada y se puso bastante nervioso). No he querido contártelo antes porque pensé que cuanto más tarde te enterases mejor sería para ti y porque me ha costado mucho el poder decírtelo, pero ya no hay marcha atrás. Como bien sabes hace menos de un mes, he tenido que ir al médico porque me encontraba algo mal y tu tan atento como siempre me preguntaste que cómo me fue, yo te dije que estaba como un roble para no preocuparte y que ese mal estar se debía a una pequeña gripe. Pero eso no es verdad, en realidad lo que me dijo el médico es que tengo cáncer de mama y que debo de seguir una serie de terapias para poder deshacerme de esa enfermedad.


Santiago-Eso no es verdad, ¿verdad Dolores? sino me lo hubieras contado antes.


Dolores-Como voy a mentir en este tipo de cosas que son tan importantes…Y como te he dicho anteriormente no te lo he contado antes porque me cuesta mucho decírtelo y porque pensé que cuanto más tiempo tardaras en enterarte mejor para ti.


Santiago-Entonces, ¿te irás para siempre de mi casa?


Dolores-Ojala no sea así, ojala me recupere y pronto estemos juntos de nuevo.


Santiago-Pero Dolores, es que no sé si podré aguantar mucho tiempo sin estar contigo, porque contigo lo paso genial y sin ti no podría hacer los deberes del colegio...¿Y quién hará la comida? (Una lágrima bajaba sin rumbo por su ojo izquierdo).


Dolores-Pues deberás hacer un gran esfuerzo como lo haré yo también.


En ese instante se abrió la puerta de la cocina y por ella salía Lourdes para despedirse de Dolores. Ella los encontró abrazados uno al otro y llorando sin cesar.


La despedida terminó bastante triste, como la mayoría de ellas…


Al día siguiente Santiago Salego se despertó por el timbre de la puerta, se vistió y se lavó como todos los días y bajó por las escaleras. En el recibidor se encontraba una mujer muy alta y con el pelo rizado, acompañada de una niña de la edad de Santiago que según él parecía un ángel enviado desde el cielo, tenía unos ojos preciosos de color azulado y un pelo largísimo de un rubio casi blanquecino. Desde ese momento en que la vio, Santiago se quedó perplejo, es lo que se conoce como amor a primera vista, se enamoró de esa niña que llegó ese mismo día a su casa con esa cara tan angelical. La cual se hacía llamar María y la mujer que le acompañaba era su madre y se llamaba Teresa.


Santiago les saludó muy amablemente, intercambiando alguna mirada deseosa con la niña que permanecía frente a la gran escalera que conducía a las habitaciones. Después de saludarlas se retiró, para dirigirse de inmediato hacia el salón que se encontraba a la derecha de las escaleras principales. Allí se encontró a su madre que se dirigía al recibidor y le preguntó que quiénes eran esas dos mujercitas que la estaban esperando. Lourdes le dijo que era la nueva criada que venia con su hija para presentarse y que empezaría su trabajo ese mismo día si le parecían bien las normas que había implantado ella.


Y así fue, ese mismo día Teresa empezó a trabajar en casa, aunque Santiago seguía muy triste por Dolores, la llegada de esta nueva criada y sobre todo la llegada de su hija María, le permitían olvidar en el mal momento en que se encontraba.


Pasaron siete años y Santiago ya tenía los dieciséis, no sabía ninguna noticia de Dolores y Teresa seguía de criada en su casa. Él estaba cada vez más enamorado de María y había conseguido llevarse muy bien con ella, Santiago comentaba que a pesar de ser una chica de clase baja y no tener muchos conocimientos sobre las cosas, era una chica muy educada.


Santiago decía a su mejor amigo Tomás que pensaba que ella también estaba enamorada de él, por la manera en que actuaba. Su amigo le decía que entonces le contase todos los sentimientos que sentía hacia ella y así ella le contase los que sentía hacia él, y todos tan felices.


Pero esa confesión le costaba mucho a Santiago Salego porque no todo el mundo pensaba como su mejor amigo, habían tratado este tema en clase y ninguno lo aceptaba, decían que un persona de “tanta” clase, como eran los chicos y chicas de ese colegio no podían enamorarse de una persona de clase baja, ya que eso era imposible y perdería todo el prestigio la persona de ese colegio que estuviese enamorada de otra de diferente clase social. Tampoco su madre estaba de acuerdo con la relación de su hijo y la hija de la criada de su casa, le amenazaba con echarle de casa y no volver a hablarle jamás.


A partir de aquí, Santiago se dio cuenta de la importancia que tenía la historia que le contaba su madre de pequeño, la de Romeo y Julieta. Ella y todos los padres de los alumnos de su colegio pensaban a favor de la familia de los amantes Romeo y Julieta, a ellos les parecía imposible que dos personas de bandas rivales (como es el caso de esta historia) o de diferentes clases sociales se amasen. Por ello Lourdes insistía tanto en contarle a su hijo Santiago Salego esa historia, para evitar que se enamorase de una persona que fuese de diferente clase social a la que él pertenecía, ya que desde su punto de vista la relaciones de ese tipo nunca acaban bien, aún jurándose amarse hasta la muerte.


Pero aquella anécdota que le contaba su madre casi todas noches a Santiago para poder dormirse, no le sirvió para que su hijo pensase de la misma manera en que lo hacía ella, sino que él lo interpretó de la forma contraria, es decir, que no por pertenecer a distinta clase social vas a dejar de amar a una persona y ésta no será nunca una relación imposible.


Un día Santiago Salego decidió contarle a María todo lo que sentía hacia ella, asumiendo después todo lo que recaería sobre él, ya fuese por parte de sus compañeros o por parte de su madre.


Estaba ella leyendo un libro en la cocina y aprovechó ese momento ya que se encontraba sola y Teresa había salido a comprar unas cosas que hacían falta para la casa. María le oyó al entrar por el sonido que hizo la puerta al abrirse, pero ella lo ignoró por completo.


Santiago se sentó en frente de la hija de la criada y se quedó observándola un tiempo…empezó con su mirada por los ojos, bajando luego por la nariz y recorriendo más tarde su pequeña boca.


María dejó de ignorarle y le preguntó que porque la miraba así. Él la dijo que tenía que confesarle algo que la interesaría, entonces ella dejó el libro que tenía cogido con sus manos sobre la mesa y se colocó en posición de escuchar.


Santiago le dijo bastante nervioso que él sentía algo más que amistad desde el primer momento en que habló con ella y que era una persona muy especial para él.


Ella le dijo que sabía que estaba enamorado de ella y que bien sabía que ella también lo estaba de él.


En ese instante parecía que se había paralizado el tiempo y que los minutos ya no corrían, los dos entrecruzaron unas miradas de satisfacción que desprendían amor por toda la cocina. Más tarde se besaron y a partir de ese día eran unos jóvenes de distinta clase social, pero estaban muy enamorados.


Al poco tiempo Lourdes se enteró de la relación de su hijo con María y como le dijo a Santiago años atrás…le echó de casa y no le volvió a hablar nunca, antes le dijo que eso no era un hijo y que había quitado todo el honor a la familia.


Entonces Santiago no tuvo más remedio que abandonar la casa en la que vivía desde que nació y el colegio en el que había estudiado desde pequeño, Santiago y María se fueron a vivir juntos a una pequeña casa en esa misma ciudad, porque Santiago odiaba las casas grandes y a la gente con mucho dinero. Por ello se mudó a una casa pequeña que se encontraba en un humilde barrio de la misma ciudad.


Era un Sábado y hacía muy mal tiempo, se pasó todo el día lloviendo de manera que parecía no terminar nunca y que todos saldrían nadando de sus casas en la pequeña ciudad donde vivía Santiago…Santiago y María (su mujer) se despertaron porque llamaron al timbre de la puerta.


Santiago la abrió y se encontró frente a él una figura humana que pertenecía a una mujer a la que no se le apreciaba prácticamente la cara, tenía un paraguas roto y vestía un chubasquero que estaba empapado de agua.


Aquella mujer tan misteriosa era Dolores, la primera criada que tuvo y a la que quería tanto. Santiago se asombró muchísimo al reconocerla y empezó a dar gritos de alegría, su mujer al oírlos salió para ver lo que ocurría. Entonces él como ya le había hablado anteriormente mucho de ella, comenzó a conversar de manera deseosa con su antigua criada y Dolores le dijo que se había recuperado muy bien de la enfermedad y que se alegraba mucho de volver a verle en esas condiciones.


Todos se olvidaron del mal tiempo que hacía afuera y pasaron un día grandioso recordando todo lo que pasaron juntos Dolores y Santiago.

domingo, 4 de noviembre de 2007

† Noche De Halloween †

Era el día 31 de Octubre del 2007 y me desperté a las 7:30 de la mañana con el sonido del molesto despertador, como si fuese un día normal. Desayuné como hacía por costumbre cada día y me arreglé con rapidez para estar puntual en el Instituto.


Eran las 10:20 y empezamos la clase de Lengua y Literatura como hacemos todos los miércoles, iniciamos la clase con la corrección de la sintaxis (que por cierto ese día me tocó empezar a mi) y más tarde el profesor nos contó que por ser el día de HALLOWEEN había dedicado la clase a contar relatos de terror con los alumnos de primero, ya que la ocasión lo merecía.



Entonces muchos de mis compañeros propusieron hacerlo nosotros también y con las luces apagadas; pero el profesor se negó ya que a varios alumnos les daban miedo todo ese tipo de historias relacionadas con la muerte y los espíritus (fantasmas) .



Pero aún sabiéndolo, el profesor nos dijo algo que podríamos experimentar esa misma noche (HALLOWEEN) y empezó a contarlo así…



Hoy a la media noche (24:00), escribid lo más claro posible vuestro nombre en un papel, colocaos una vez hecho esto en frente de un espejo, con la luz apagada y una sola vela que ilumine vuestro rostro. Colocando el papel donde está escrito vuestro nombre frente al espejo claro está.



Cuando el profesor terminó de contar esto se oyeron todo tipo de comentarios : Vaya tontería… ¡Profe no digas eso!

¡Huy! que miedo. No me gustan estas cosas…
¿Y si quemamos el papel con nuestro nombre? …


Y el profesor contestó con ironía: cuando lo hagáis, si es que lo hacéis, ya me contareis lo que os ha ocurrido, si estáis aquí para contarlo claro.



Tocó la sirena que avisa el comienzo del recreo a las 11:10 y todos salimos con la duda de si realmente pasaría algo al hacer ese experimento. Muchos dijeron que lo intentarían hacer y otros contaron que no lo harían ya que les daba miedo.



Eran ya las 14:20 y yo estaba muy contento porque empezaba un largo puente (el grandioso puente) en el que podríamos descansar. Pero todavía seguía pensando en lo que nos dijo el profesor de Lengua y Literatura y nada más llegar a casa lo primero que hice fue dejar la cartera en el armario, la que utilizaría poco durante el puente y apuntar en el primer papel que encontré mi nombre lo más claramente posible. Después llegué al salón y cogí una vela aromática que coloqué sobre el escritorio de mi habitación junto al papel con mi nombre.



Al terminar de comer me puse a chatear con mis amigos y me metí en algún blog para ver si había actualizaciones y hacer en el mío algún cambio. Hasta que llegaron las 18:00 ya que estaba invitado al cumpleaños de una amiga mía. A esa misma hora quedamos en el portal de Belén, una amiga y compañera de clase, éramos cinco personas y fuimos a la casa de la cumpleañera.



Cuando llegamos estaba la puerta abierta y todas las luces apagadas, según pasamos por la entrada nos dimos cuenta de que estaba todo el suelo lleno de velas que daban un aspecto a la casa algo tétrico y terrorífico, muy adecuado para el día en que nos encontrábamos. Intentamos encender las luces, pero éstas no se encendían y desconocíamos la causa de porqué no se iluminaban. Pasamos el salón y al llegar al pasillo la chica que cumplía años y otra amiga salieron disfrazadas de una habitación y nos dieron un susto de muerte.
Todos pegamos un gran salto por el susto que nos habían dado y luego nos quedamos paralizados. Más tarde encendieron el automático de la luz y por tanto las luces también se encendieron, todos nos empezamos a reír sin parar por el susto que nos habíamos llevado.



La verdad es que después del susto lo pasamos muy bien y el cumpleaños terminó con éxito.



Ya eran las 22:00 cuando llegué a mi casa y lo primero que hice fue cenar y ver un rato la televisión. Se iba acercando media noche y cada vez me estaba poniendo más nervioso, eran las 23:55 cuando estaba en mi habitación cogiendo la vela y el papel con mi nombre. Me dirigí al espejo del pasillo ya que es muy grande y apagué las luces, encendí la vela y la coloqué encima de una mesita que hay en el pasillo, después me agaché sujetando el papel frente al espejo con las dos manos, para que la vela iluminara todo mi rostro como indicó el profesor.



Me quedé un rato esperando en esa situación y como vi que no pasaba nada me fui a levantar, cuando intenté levantarme un frío escalofriante recorrió toda mi columna vertebral e hizo que me volviese a poner de rodillas, de repente se apagó la vela ya que pasó una brisa de aire que me dejó congelado y dejo el espejo como con escarcha.



De repente mientras mantenía la mirada fija sobre el espejo y con un miedo extremadamente grande vi aparecer en él una figura oscura con la cara muy pálida que vestía una gran túnica negra.


Ésta me dijo con una voz ronca y profunda : Álvaro, soy una persona muy temida por la gente porque conmigo todo acaba, yo soy el Juicio Final. Y sólo estoy aquí para decirte una cosa, todavía te queda mucho para que vengas conmigo y eso depende de como lo mires puede ser bueno pero también malo…



¡Hasta dentro de mucho tiempo!


Al acabar esta última frase las luces se encendieron solas y ese frío tan intenso desapareció por completo, todo volvió a la normalidad.





FELIZ ††† HALLOWEEN!

domingo, 28 de octubre de 2007

La Máquina De La Cualidad


Soy Álvaro, un chico de quince años y me he enterado de que en un lugar muy lejano han fabricado una máquina maravillosa; es capaz de ceder a cualquiera que lo desee una sola cualidad que no tenga.


En mi caso la cualidad que intentaría conseguir a través de esa máquina tan fascinante sería la espontaneidad; ya que soy una persona que antes de hacer o decir algo lo pienso mucho; y en ocasiones desearía dejarme llevar más por los impulsos y no tanto por la razón, claro está siempre dentro de unos límites. Pero si quisiera hacer alguna vez una pequeña locura, es decir, perder un poco los papeles (en el buen sentido de la palabra).



A decir verdad, yo no creo mucho en este tipo de cosas, pero si me gustaría conocer el lugar donde se encuentra dicha máquina y dirigirme hacia ella, por intentarlo no pierdo nada.


Gracias a Internet he podido averiguarlo, se encuentra en una ciudad canadiense llamada Montreal y es una máquina un tanto extraña al igual que su labor. Este artefacto mide unos tres metros y tiene una especie de boca gigante en la que te debes introducir para que pueda cederte la cualidad que deseas obtener. El proceso dura pocos minutos, y cuentan que todavía la están examinando, ya que muchos la encuentran una máquina peligrosa y no conocen los efectos secundarios que pueda tener.



Muchos reporteros y periodistas han hecho ciertas entrevistas al inventor de esta máquina y todos le han hecho la misma pregunta : ¿Cómo nos podría demostrar que es cierto lo que dice de esta máquina?. Y siempre responde de la misma manera y con un tono de ironía y simpatía : “Pues, porque yo al terminar mi gran invento, le pedí la cualidad de ser un gran inventor, es decir, que todos los inventos que hiciese funcionaran correctamente como yo quería que fuese”.



También un familiar del inventor (su hermano) afirma que él era una persona bastante desagradable; y utilizando la máquina, actualmente es la persona más simpática y agradable que te puedes imaginar, apoyado también por su mujer y sus hijos.


Mis padres me han propuesto ir el año que viene a un país extranjero para aprender inglés durante el próximo verano. Y sabiendo esto, intentaré convencerlos para ir a Canadá, como no a Montreal. Procuraré hacer una escapada al lugar de la ciudad donde se encuentra la máquina y pediré que me conceda la cualidad que deseo.

domingo, 21 de octubre de 2007

Descripción De Un Compañero


Ahora, el tema de la redacción siguiente es la descripción de un compañero elegido; dado que todavía muchos de nosotros no nos conocemos lo suficientemente bien como para saber cuál es nuestra forma de vida, cuáles son nuestros gustos, lo que solemos hacer fuera del Instituto (fines de semana, puentes, fiestas patronales…).

Nos va a llevar a utilizar la parte del cerebro que mucha gente no usa, y ésta es la imaginación (el tema principal de esta redacción ).



Así que aún teniéndomelo que imaginar, espero acercarme lo mejor posible a la persona que tengo que describir.


Empiezo con la descripción…


Ana García Naranjo es una quinceañera que va a la case de 4ºA al I.E.S Felipe Trigo.

Ella es una chica alta, con ojos marrones, y con el pelo rizado (antes lo llevaba largo, pero se lo ha cortado hará una semana).Es sencilla y bastante inteligente, simpática con la gente que conoce y muy amiga de sus amigos, es decir, hace lo que sea por ayudarte cuando lo necesitas.

Da la impresión de ser una chica sincera, que siempre o al menos casi siempre dice la verdad y sin tener que esconderse de nadie, sin tener ningún miedo.


Le gusta mucho el cine (casi todos los géneros) y por ello ve muchas películas, de mayor podría estudiar un módulo de Imagen y Sonido ya que se le da muy bien la asignatura de Imagen y Expresión. Esto lo haría después de haber terminado el Bachillerato de Ciencias de la Salud claro está, porque este año ha elegido la optativa de Biología y Geología, cuando podía haber elegido Tecnología.


También le gusta la lectura, o eso creo, aunque no haya nombrado ningún libro leído en la presentación para el blog.


No le gustan mucho las nuevas tecnologías ya que no le gusta la asignatura que las estudia y tampoco tiene ordenador.

Tampoco le gusta la gente mentirosa o que critica a las espaldas.

Y no le gusta hacer mucho deporte ya que le parece algo innecesario, si lo hace es por obligación.


Ahora voy a intentar describir cómo es un día de diario para mi compañera Ana (Anita para los amigos).


A las siete y media suena el despertador que le avisa a Ana que llega la hora de levantarse, ella lo apaga y se levanta. Después va al servicio a lavarse, peinarse… y vuelve de nuevo a su habitación para abrir el armario y elegir la ropa que se pondrá, antes de ello mira el horario para ver si hay Educación Física (asignatura que no le gusta mucho) para saber si tiene que ponerse chándal o no.


Una vez vestida Ana se dirige hacia la cocina para prepararse el desayuno y desayunar, viendo un rato la televisión medio dormida mientras hace esto.

Más tarde revisa la cartera por si se le ha olvidado algo, saliendo después de casa para ir al Instituto. Llega allí sobre las ocho y veinte encontrándose con sus amigas y compañeras de clase, con las que se va en los recreos.

Finalizadas ya las clases se va a su casa a comer y nada más terminar de comer y ver un rato la televisión, se pone a hacer los deberes mandados y a estudiar.


Hasta llegar la hora de cenar y acostarse sobre las diez y media para descansar y reponer fuerzas para el día siguiente.